¿En qué consiste la iniciativa y dónde se ha implementado (en qué ciudad o en qué país, por ejemplo)?
La Educación para el Desarrollo Rural en la Zona de Seti, también conocida como El Programa de Seti, consistió en un programa piloto que tenía como objetivo mostrar de qué manera se podía hacer más efectiva la educación con un enfoque integrado e innovador, que permitiera lograr un desarrollo rural indispensable, resultando en una mejor calidad de vida. La zona de Seti tiene un total de 4861 millas cuadradas, que abarcan el 9% de la superficie total de Nepal y tres regiones geográficas: el Himalaya, la media montaña y el Terai. Con una población de 700 000 habitantes y una densidad de 144 personas por milla cuadrada[1], cuenta tan solo con dos asentamientos urbanos y está mal comunicada. Tres de los cinco distritos funcionan como centros comerciales. La falta de desarrollo en la zona fue el elemento decisivo que contribuyó a su selección para realizar el proyecto (Regmi, 2011).
¿Cómo se estableció la iniciativa? ¿Cómo se puso en práctica?
En 1971, se introdujo el Plan del Sistema Nacional de Educación de Nepal como un intento de aumentar la relevancia de la educación para el desarrollo rural. En 1978 y 1979, la Secretaría de la UNESCO elaboró borradores de propuestas para el proyecto Educación para el Desarrollo Rural. Tras una revisión del borrador en 1980, el Gobierno, la UNESCO y el PNUD acabaron firmando la propuesta en septiembre de 1981. La ejecución comenzó en octubre de 1981 y se prolongó durante cuatro años y medio, finalizando en diciembre de 1985. En junio de 1985, los dos distritos montañosos de Doti y Bajhang, en el extremo occidental de Nepal, zonas remotas y privadas de comunicaciones, participaron en el proyecto.
El proyecto se centró en objetivos de desarrollo y metas inmediatas, una de las cuales fue la promoción del desarrollo rural en Nepal mediante la implantación de un sistema de educación básica. Comenzó como un proyecto experimental en la zona de Seti, con vistas a su expansión por todo el país. Se seleccionaron tres aspectos como factores impulsores para transformar las zonas rurales y hacer de la educación el sector principal: el sistema administrativo, el profesor como agente de cambio y la escuela como institución comunitaria.
El Plan contempló ocho enfoques innovadores para alcanzar los objetivos, clasificados en tres categorías: servicios de apoyo, mejora del profesorado y escuelas comunitarias. Se impartieron al menos 480 cursos de alfabetización funcional, que permitieron alfabetizar a 14 400 adultos. Se crearon y distribuyeron a los profesores de la zona planes de estudio, guías didácticas y materiales. El marco básico se revisó periódicamente. En diciembre y enero de cada año se elaboró un plan operativo anual detallado. Cabe destacar que los planes operativos bimensuales o trimestrales establecían los plazos, asignaban las tareas descritas en el plan anual a los miembros del personal, especificaban las fechas y la duración de las visitas sobre el terreno, calculaban el coste y estimaban el presupuesto teniendo en cuenta las actividades no habituales. Cada actividad del proyecto se evaluó de forma continua.
Cada año se cumplimentaron un mínimo de 11 formularios de supervisión para cada escuela satélite, así como 6 formularios para cada clase de adultos. Todos los formularios se analizaron y clasificaron por proyecto y por miembros del personal, lo que permitió hacer un seguimiento de los avances en aspectos concretos e identificar problemas. Los miembros del personal que se desplazaron al terreno proporcionaron los resultados de la evaluación y sus comentarios en un informe escrito que se presentó en los dos o tres días siguientes a su regreso a la oficina. El proyecto organizó regularmente programas de formación, seminarios, talleres y sesiones para debatir las actividades del proyecto (Regmi, 2011).
¿Qué partes interesadas participan en el diseño y la implementación de la iniciativa? ¿A qué sectores representan?
Las partes interesadas que participaron en el diseño y la implementación de la iniciativa representaban tanto al sector privado como al estatal. Participaron varios representantes del gobierno, en su mayoría de la Secretaría Adjunta del Ministerio de Educación y Cultura, que actuaron como directores. Las Oficinas de Educación de los distritos proporcionaron supervisores e instructores para los cursos y colaboraron con los directores asociados en la planificación y organización de las actividades. La agencia ejecutiva del proyecto fue la UNESCO. El PNUD y UNICEF prestaron su apoyo, junto con el Servicio Universitario Mundial de Ginebra. Como último grupo de partes interesadas estaban los miembros del personal y los propios participantes en el proyecto (Regmi, 2011).
¿Qué repercusiones tiene la iniciativa en cuanto a la promoción del aprendizaje a lo largo de toda la vida? ¿A quién beneficia y de qué manera?
La iniciativa creó 23 Centros de Recursos Educativos (CRE) en los distritos nepalíes de Doti y Bajhang. Los CRE se convirtieron en el principal medio para promover una mejora educativa. Se ubicaron en escuelas secundarias y de primer ciclo de secundaria, teniendo en cuenta también las ubicaciones de las escuelas satélite, que debían estar en un radio de tres horas a pie. Cada centro daba servicio a entre 6 y 14 escuelas satélite.
Otra actividad exitosa y orientada a la acción fue el programa de alfabetización funcional. Se diferenció de otros programas de educación de adultos en Nepal por su enfoque único. Todos los participantes llevaron a cabo 18 actividades de desarrollo diferentes, entre ellas la construcción de letrinas, de cocinas y la limpieza de caminos de la aldea. Algunas de las actividades prácticas precisaron de aportaciones adicionales por parte del proyecto, tales como árboles frutales y semillas de hortalizas. Las clases impartidas en 1982-83 fueron 18 y aumentaron rápidamente a 74 en 1983-84 y 103 en 1984-85. Con una capacidad de 25 alumnos por clase, la asistencia media diaria superaba los 20. La mayoría de participantes fueron mujeres. Más de la mitad de los pueblos que participaron en las actividades señalaron una mejora significativa del entorno físico y social. Por ejemplo, los participantes construyeron letrinas en aldeas que antes no tenían, otras aldeas se beneficiaron de huertos que prosperaron y los estudiantes adultos voluntarios instalaron nuevos sistemas de abastecimiento de agua. Otra pequeña pero importante iniciativa fue la publicación de un periódico que contenía secciones prácticas sobre la resolución de problemas, información sobre las actividades de la aldea y una sección de entretenimiento con poemas y cuentos. Los participantes en las clases de adultos crearon centros de lectura en las aldeas, construyeron 26 escuelas y 14 parques infantiles en Doti y 23 escuelas y 5 parques infantiles en Bajhang (Regmi, 2011; UNESCO, 1985).
Referencias
Regmi, K. D. 2011. Lifelong Learning in Nepal: Contexts and Prospects [El aprendizaje a lo largo de toda la vida en Nepal: Contextos y perspectivas]. [En línea] s.l., Education Resources Information Center (ERIC). Recuperado de: https://files.eric.ed.gov/fulltext/ED527446.pdf [Consultado el 16 de septiembre de 2021].
UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) / PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo). 1985. Nepal: Education for Rural Development in Seti Zone [Nepal: Educación para el Desarrollo Rural en la Zona de Seti]. Paris, UNESCO.